📢 Desde “Ahora Que Sí Nos Ven” damos a conocer las cifras de femicidios en Argentina entre el 1 de enero y el 30 de octubre de 2023, elaboradas a partir del análisis de medios gráficos y digitales de todo el país llevado adelante por nuestro observatorio de violencias de género.
Algunos datos destacados:
• 257 femicidios en 2023
• 1 femicidio cada 28 horas en lo que va de 2023
• 22 femicidios durante octubre
• 302 intentos de femicidio y 48 intentos de femicidios vinculados en 2023
• 5 Transfemicidios/travesticidios
• El 59% de los femicidios fue cometido por las parejas y ex parejas de las víctimas
• El 59% de los femicidios ocurrió en la vivienda de la víctima
• 10 de los femicidas pertenecen a las fuerzas de seguridad
• 50 víctimas habían realizado al menos una denuncia y 30 tenían medidas de protección
• Al menos 211 niñes perdieron a sus madres como consecuencia de la violencia machista en lo que va de 2023
Desde “Ahora que sí nos ven” alertamos que la violencia machista no cesa. Nuestra vida corre peligro todos los días cuando ocurre un femicidio cada 28 horas en nuestro país. Durante 2023 registramos 257 casos de femicidios y un total de 350 intentos de femicidios directos y vinculados, estos números dan cuenta de la expresión más extrema de la violencia de género.
¿Quién nos protege?
En lo que va de 2023, 50 víctimas de femicidio habían denunciado previamente a su femicida, y 30 contaban con medidas de protección, sin embargo, las asesinaron. Mes a mes observamos cómo la Justicia, y sus funcionarixs, desprotejen y violentan a las víctimas, ya sea por acción u omisión. Señalaremos, hasta que jueces y juezas lo tengan presente, que cada vez que se hace público que una víctima de femicidio había realizado una denuncia o tenía una medida de protección, eso desalienta e infunde temor a otras víctimas. La Justicia disciplina con cada medida que toma. Es hora de que salden la deuda histórica que tienen con nosotrxs con una reforma judicial transfeminista, y que cumplan con la actual Ley Micaela vigente desde 2019.
Libertad para matar
Según nuestros datos, quienes deben controlar el efectivo cumplimiento de las medidas de protección, las fuerzas de seguridad, cuentan con femicidas en sus filas. De los 231 femicidios registrados en 2023, 7 fueron cometidos por un policía, 1 por un ex policía, 1 por un gendarme y 1 por un militar. Necesitamos fuerzas de seguridad con un enfoque de derechos humanos, en particular perspectiva de género y diversidad. Mientras que la derecha propone flexibilizar la tenencia de armas, en todos los casos en que los femicidas eran miembros de fuerzas el acto se cometió con un arma de fuego. Si analizamos las formas en que las 257 mujeres fueron asesinadas en 2023, la proporción mayor corresponde a armas de fuego con un 27,6%, indicador que está aumentando en los últimos meses. Esta es otra de las tantas razones por las que las feministas decimos NO a las propuestas de La Libertad Avanza y también planteadas en alguna ocasión por Patricia Bullrich: porque sabemos que la libre portación de armas no sólo recrudecería los crímenes violentos en nuestra sociedad, sino que además seríamos especialmente las mujeres quienes padeceríamos en nuestros propios cuerpos las consecuencias.
Nos matan en nuestras casas
Este año el 56.3% de los femicidios tuvieron lugar en el hogar de la víctima, que en algunos casos comparte con su femicida (pareja o familiar). Este es un dato que no puede dejarse de lado cuando se analiza y discute la situación habitacional de las mujeres. Somos nosotras las que cobramos un 27% menos que los varones, las que dedicamos el doble de tiempo que los varones a las tareas de cuidado, las que accedemos mayormente a trabajos informales, las que no llegamos a los años de aportes jubilatorios y, por ende, tenemos más obstáculos para acceder a un alquiler regular, y ni pensar a una vivienda propia. Entonces, ¿cómo puede una víctima de violencia salir de esa situación en estas condiciones de desigualdad? Les recordamos a nuestrxs legisladores nacionales que cuando se debate sobre la Ley de Alquileres no se puede dejar de lado cómo impacta el acceso a la vivienda de forma diferenciada en las mujeres en un sistema patriarcal y capitalista. En este sentido, exigimos una Ley de Alquileres transfeminista, porque el acceso a la vivienda digna es un derecho. Libertad es tener autonomía económica.
El femicida es conocido
En 2023 registramos que en el 74% de los casos de femicidios el femicida pertenecía al círculo íntimo de la víctima, o sea que era conocido de ella y hasta tenía un lazo afectivo y de confianza. Al mismo tiempo, en el 57% de los casos de femicidios el femicida era la pareja o ex pareja de la víctima. Esto refleja que es indispensable construir nuevas formas de vincularnos, en las que las mujeres dejemos de ser pensadas como propiedad de los varones, donde impere el respeto y la igualdad. A 17 años de la sanción de la Ley de Educación Sexual Integral exigimos que se cumpla en todos los niveles educativos. Lejos de adoctrinar, como sostiene la derecha, la ESI busca identificar, prevenir y erradicar las violencias. Quien está en contra de la ESI apaña las violencias y los abusos, ya que según el Ministerio Público Tutelar (MPT) de la Ciudad de Buenos Aires, el 80% de los niñxs víctimas de abuso sexual denunciaron a raíz de las clases de ESI. Libertad es no ser abusadx.
Sin las trans y travestis no hay democracia
Si bien recuperamos la democracia en 1983, el colectivo LGBTI+ continúa viendo vulnerados sus derechos. En lo que va de 2023 registramos al menos 5 transfemicidios y travestidicios, esta cifra surge de los casos difundidos por los medios de comunicación y, como todavía no son considerados noticiables por éstos, se encuentra subrepresentada. A más de dos años de la desaparición de Tehuel de la Torre, seguimos exigiendo saber dónde está y qué pasó con él. Nos falta Tehuel, no sólo por sus agresores transodiantes, sino también porque existe un sector político y económico transodiante, que obstaculiza el acceso del colectivo trans al trabajo, la educación y la salud. Pero, además, las organizaciones de derecha en Argentina en tiempos de elecciones se dedican a avalar y fomentar la violencia hacia el colectivo LGBTI+. Una muestra de esto es la brutal agresión física y verbal a Manu Mireles, secretaria académica del Bachillerato Mocha Celis, activista trans no binarie y defensora de derechos humanos de parte de un grupo de varones hace unos días en el barrio porteño de Caballito. Nuestra solidaridad con Manu y con todxs quienes sufren el hostigamiento machista. Nos quieren disciplinar, pero no van a poder. Libertad es habitar el espacio público sin temor a expresar nuestra identidad.
A semanas de las elecciones presidenciales, es fundamental entender que si te indigna que haya 1 mujer muerta por el sólo hecho de ser mujer cada 28 horas, debés estar a favor de tener un Estado presente, activo y garante de nuestros derechos. Para erradicar las violencias machistas necesitamos más Estado y presupuesto para desarrollar políticas públicas que permitan el acceso a nuestros derechos fundamentales. Somos el 50% de la población y del electorado, integramos la parte de la población más pobre e impactada por las crisis económicas. Somos quienes sostenemos al mercado, porque sin el tiempo que le dedicamos a las tareas de cuidado éste no podría estar en pie. Por eso, nuestra agenda es una agenda que tiene que interpelar a toda la sociedad, en especial a lxs votantes y a lxs políticxs.
Menos derecha, más derechos.
Libertad es vivir una vida sin ser violentadx.