🚨 212 FEMICIDIOS en 2022

Femicidios
Inicio:01/01/2022Fin:31/10/2022

Desde “Ahora Que Sí Nos Ven” damos a conocer las cifras de femicidios en Argentina entre el 1 de enero y el 31 de octubre de 2022, elaboradas a partir del análisis de medios gráficos y digitales de todo el país llevado adelante por nuestro observatorio de violencias de género.

• 1 femicidio cada 24 horas en octubre • 181 intentos de femicidio en lo que va de 2022 • 9 Transfemicidios/travesticidios publicados en los medios de comunicación frente a 32 casos denunciados por organizaciones LGBTIQ+ • El 61,3% de los femicidios fue cometido por las parejas y ex parejas de las víctimas • El 65% de los femicidios ocurrió en la vivienda de la víctima • 7 femicidas policías y 2 militares • 46 femicidas se suicidaron y 5 intentaron suicidarse • 33 víctimas habían realizado al menos una denuncia y 22 tenían medidas de protección • Al menos 189 niñxs perdieron a sus madres como consecuencia de la violencia machista en lo que va de 2022

De acuerdo al registro que realizamos en Ahora que sí nos ven, el 65% de los femicidios ocurrió en la vivienda de la víctima, que en muchas ocasiones comparte con el agresor. Esto refleja que las mujeres estamos más expuestas a la violencia en nuestros hogares, lejos del mito que afirma que la calle es un territorio peligroso para nosotras. En muchos de los casos que relevamos en estos años hemos observado que las víctimas de violencia no pueden abandonar el hogar ya que no tienen recursos suficientes. Según el INDEC la brecha de género de ingresos es el 27,7%, por eso resulta fundamental asegurar a las mujeres y LGBT las condiciones materiales para acceder al trabajo formal, la vivienda y la educación.

Durante 2022 registramos que en el 61,3% de los casos el femicida era la pareja o ex pareja de la víctima. A su vez, el 87,7% de los casos fueron perpetrados por una persona del círculo íntimo de la víctima, o sea familiares (15,1%) y conocidos (11,3%). En el 10,8% de los casos no contamos con la información del agresor, lo que no implica que no sea una persona conocida de la víctima. Como mencionamos, los femicidas no son locos o extraños, compartimos espacios de estudio, trabajo, amistad o el hogar, cuentan con nuestra confianza y son personas con quienes tenemos un vínculo afectivo. A partir de los datos relevados de medios gráficos y digitales de Argentina observamos que en 9 casos el femicida pertenecía a las fuerzas de seguridad o armadas. En 7 casos el femicida era Policía y en 2 militares. Que los femicidas integren estas instituciones es un factor de riesgo dado que tienen a su disposición un arma de fuego y una posición de poder por su relación con las fuerzas de seguridad o armadas. De hecho, de estos 9 casos en 7 los femicidios fueron cometidos con un arma de fuego y 2 mediante asfixia. Es urgente que se tomen medidas al interior de las instituciones de seguridad para no seguir apañando a los violentos y desproteger a las víctimas de la violencia machista.

Este mes volvimos a ver cómo la Policía no sólo encubre a sus miembros violentos, sino que ejerce violencia institucional hacia las mujeres que van a denunciar. Noelia Sosa, de 30 años, vivía en Trancas, Tucumán, y es a la comisaría de allí que fue a denunciar a su pareja por violencia de género. La Policía no le quiso tomar al denuncia porque “no estaba el oficial de guardia”. Expuesta y desprotegida, Noelia se quitó la vida esa tarde. En un país en el que el 16% de las víctimas había realizado al menos una denuncia y sólo el 10% de las víctimas tenían medidas de protección, el caso de Noelia no llama la atención. Exigimos que se implemente correctamente la Ley Micaela en las fuerzas de seguridad y en el Poder Judicial, nadie puede negarse a tomarte la denuncia, no hay excusa para eso. El Estado no puede seguir permitiendo que los funcionarixs pùblicxs no se sometan a las leyes mientras continúan violentando institucionalmente y vulnerando los derechos de mujeres, LGBT y niñeces. Como cada mes repetimos que fuerzas de seguridad y Justicia respetuosas de los derechos humanos son una deuda de la democracia. Respecto de la conducta de los agresores luego del hecho, hasta el 31 de octubre en 46 de los 212 casos los femicidas se suicidaron luego del femicidio, 45 se dieron a la fuga, 37 intentaron ocultar su autoría y 5 intentaron suicidarse. Para el agresor todas estas decisiones son intentos de salir impunes de la situación y para las familias y allegadxs de las víctimas supone el impedimento para conseguir Justicia.

Las vidas trans importan Del 1 de enero al 31 de octubre de este año contabilizamos 9 transfemicidios y travesticidios. Como mencionamos todos los meses, esta cifra está subrepresentada ya que nuestra fuente, los medios de comunicación, no cree noticiable el asesinato de personas del colectivo travesti trans. Resulta necesario que las empresas de comunicación y lxs comunicadorxs dejen de expresar su espanto ante casos de violencia y realmente se comprometan. Un punto más de rating no puede justificar la violencia simbólica hacia las víctimas. En esta línea, continuamos exigiendo la reglamentación de la Ley de Equidad en Medios de Comunicación, aprobada hace un año. Para erradicar la violencia machista necesitamos más participación de mujeres y personas trans feministas en los medios. Sólo así podremos transformar esta realidad en una igualitaria y libre de violencias. Asimismo, en el mes del orgullo seguimos pidiendo por la aparición de Tehuel de la Torre, desaparecido desde el 11 de marzo de 2021 luego de ir a una entrevista laboral. Es tiempo de menos rainbow washing y más traVajo.