🚨175 FEMICIDIOS EN 2023

Femicidios
Inicio:01/01/2023Fin:30/07/2023

Desde “Ahora Que Sí Nos Ven” damos a conocer las cifras de femicidios en Argentina entre el 1 de enero y el 30 de julio de 2023, elaboradas a partir del análisis de medios gráficos y digitales de todo el país llevado adelante por nuestro observatorio de violencias de género.

Algunos datos destacados:

  • 1 femicidio cada 29 horas en lo que va de 2023
  • 206 intentos de femicidio y 28 intentos de femicidios vinculados en 2023
  • 4 Transfemicidios/travesticidios
  • El 59% de los femicidios fue cometido por las parejas y ex parejas de las víctimas
  • El 57% de los femicidios ocurrió en la vivienda de la víctima
  • 9 de los femicidas pertenecen a las fuerzas de seguridad
  • 38 víctimas habían realizado al menos una denuncia y 25 tenían medidas de protección
  • Al menos 133 niñes perdieron a sus madres como consecuencia de la violencia machista en lo que va de 2023

Desde “Ahora que sí nos ven” alertamos que la violencia machista no frena. Nuestra vida corre peligro todos los días cuando ocurre 1 femicidio cada 29 horas en nuestro país. En lo que llevamos del 2023 registramos 175 casos de femicidios y un total de 234 intentos de femicidios directos y vinculados, cifras que dan cuenta del peligro al que cada día estamos expuestas las mujeres y disidencias en manos de varones que parecieran recrudecer su violencia aún más cuando intentamos alejarnos o pedir ayuda.

El femicida es conocido

Respecto del vínculo de la víctima con el agresor, en el 76% de los femicidios el femicida pertenecía al círculo íntimo de la víctima, es decir, que se tratan de hombres conocidos por la víctima, con los que se entiende que en algún momento los ha unido un vínculo de confianza. El 59% de los femicidios ocurrieron en manos de la pareja o ex pareja de la víctima. Esto deja en evidencia la necesidad de transformar los vínculos sexo- afectivos que históricamente se basaron en la asimetría de poder. Es urgente que se implemente la Educación Sexual Integral, para que niñxs y adolescentes construyan relaciones más igualitarias, pero también es necesario que desde la industria cultural se representen imaginarios del sexo y el amor donde la base sea el respeto, el consentimiento y la libertad. No podemos seguir naturalizando conductas violentas con demostraciones de amor. No podemos seguir permitiendo que los hombres nos consideren de su propiedad, al punto de intentar quitarnos la vida si decidimos terminar con la relación.

“Esta noche no salís viva; si no sos mía, tampoco vas a ser de nadie más”, le dijo a su ex pareja mientras conducía y la golpeaba, hasta que volanteó y saltó del vehículo dejando a la mujer en el interior mientras el auto se despistaba. Esto sucedió hace una semana en la ciudad de Oberá, Misiones, y también en el mes de marzo, en la ciudad de Neuquén, otro femicida le decía estas mismas palabras a su exmujer mientras la intentaba degollar con una navaja: “Si no sos mía, no sos de nadie”.

Medidas de (des)protección

En lo que va de 2023, 38 víctimas de femicidio habían denunciado previamente a su agresor, y 25 contaban con medidas de protección. Es muy lamentable saber que a pesar de haber recurrido a la Justicia estas mujeres han sido asesinadas. Es indignante saber que en muchos de estos casos los femicidas han violado perimetrales sin ningún tipo de inconveniente, lo que deja en evidencia que las medidas de protección son ineficientes. Esto es gravísimo para nuestras vidas, y también dificulta las campañas que desde las organizaciones de la sociedad civil hacemos para incentivar y acompañar a mujeres en situación de violencia a realizar las denuncias correspondientes. Necesitamos de manera urgente que estas medidas se revisen, se acompañen con personal capacitado y con presupuesto, que rediseñen y se ejecuten de manera eficiente. Necesitamos garantizar a las mujeres que denuncian que el Estado las puede ayudar, que les podrá salvar la vida. Seguiremos luchando y exigiendo que las instituciones que reciben nuestras denuncias actúen con celeridad, con eficacia, y con perspectiva de género y de derechos. Exigimos una reforma judicial transfeminista, que escuche y proteja realmente a las mujeres y disidencias.

Fuerzas de seguridad

En lo que va del año hemos registrado 9 femicidios en los que el femicida pertenece a algunas de las fuerzas de seguridad. Es importante resaltar que cuando un agresor pertenece a alguna de estas fuerzas se incrementa el factor de riesgo de la mujer que está en situación de violencia. En primer lugar, porque tiene el acceso fácil a su arma reglamentaria, y también porque los femicidas que pertenecen a estas fuerzas tienen complicidades dentro de la institución a la que pertenecen que hace que muchas veces las mujeres se sientan intimidadas a la hora de hacer una denuncia, porque pueden pensar que estos agresores serán protegidos, e incluso que esto podría poner aún más su vida en riesgo. Desde Ahora Que Sí Nos Ven exigimos que ante algún caso de denuncia de un agresor de género que pertenezca a estas fuerzas, se los aparte. Además, y como venimos reclamando desde hace mucho tiempo, necesitamos que estas instituciones cumplan con la capacitación en perspectiva de género e interseccionalidad, y también de diversidad. No solamente en los agentes, sino también como en los cargos jerárquicos. Necesitamos urgente una reforma de las fuerzas de seguridad, no solamente transfeministas, sino democráticas y respetuosas de los derechos humanos. Sin un cambio de paradigma es muy difícil que puedan cambiar las prácticas al interior y al exterior de las fuerzas.

Violencias contra las infancias

En lo que va del año 2023 al menos 133 niñes perdieron a sus madres víctimas de femicidios, y en muchos de estos casos en manos de sus propios padres, incluso pudiendo haber sido testigos de las agresiones . Esta cifra demuestra la contundencia con la que esta problemática afecta a las infancias, quienes están expuestas a situaciones de violencia permanentes en su hogar, ya que sabemos que los femicidios son la expresión máxima de la violencia machista, la “punta del iceberg” de una gran cantidad de violencias a las que las mujeres nos enfrentamos a diario, situaciones en las que los niños, niñas y adolescentes se encuentran involucrades y de las que también son víctimas.