Desde el Observatorio de las Violencias de Género “Ahora Que Sí Nos Ven” damos a conocer las cifras de femicidios en Argentina entre el 1 de enero y el 30 de junio de 2020, elaboradas a partir del análisis de medios gráficos y digitales de todo el país.
Algunos datos destacados:
Los datos relevados de medios gráficos y digitales de todo el país nos muestran que la violencia machista no disminuye. En junio ocurrieron 21 femicidios, lo que nos arroja un total de 162 femicidios durante este año. En el 69% de los casos se observó que el femicida fue la pareja o ex pareja y el 70% de los femicidios tuvo lugar en la vivienda de la víctima, demostrando nuevamente que el hogar continúa siendo el espacio más inseguro para las víctimas de violencia machista. Este dato cobra mayor relevancia en el contexto de Aislamiento social, preventivo y obligatorio, dado que la mayoría de las víctimas se encuentran más expuestas al estar aisladas con su agresor.
Al mismo tiempo, según los datos relevados en los medios hemos encontrado que de las 162 víctimas de femicidios ocurridos en 2020, 33 habían realizado una denuncia previa y 11 tenían medidas de protección. A pesar de haber tenido acceso a la Justicia, las asesinaron. En un escenario en que cada 27 horas ocurre un femicidio, resulta urgente la formación en perspectiva de género de los actores del Poder Judicial y de las fuerzas de seguridad para que no sólo se dicten medidas de protección, sino para que también se dé un cumplimiento efectivo de las mismas y se contenga adecuadamente a las víctimas, sin estigmatizarlas, revictimizarlas ni violentarlas. El femicidio no es un delito menor, es la expresión extrema del machismo. En este sentido, sabemos que el Poder Judicial y las fuerzas de seguridad, como toda institución, se inscriben dentro de una cultura patriarcal y reproduce sus prácticas, por eso es necesario que se aplique la Ley Micaela con el objetivo de que se tomen medidas de protección adecuadas, con celeridad, propiciando la escucha de las víctimas y el cumplimiento de sus derechos. Es sustancial comprender que cada femicidio que ocurre es un mensaje aleccionador para las mujeres, así como lo es cuando una mujer no es protegida por el Estado.
Entendemos que la violencia machista es un problema que se inscribe en una sociedad patriarcal que produce y reproduce desigualdades, por eso es importante nuestro compromiso como amigxs, vecinxs, conocidxs. El fortalecimiento de las redes solidarias, el acompañar y estar atentxs ante situaciones de violencia es vital para poder frenarla. Los femicidios son la otra curva que debemos achatar hasta erradicar, y eso es responsabilidad de todxs